La lavativa broncoalveolar (BAL) es un método mínimamente invasivo de diagnóstico médico que consiste en inyectar una solución estéril de fluido fisiológico a 37°C o un agente mucolítico en los bronquios y alveolos de los pulmones. Este fluido se recoge luego y se utiliza para realizar ciertos análisis en busca de infecciones u otras patologías. La lavativa broncoalveolar (BAL) se utiliza para muestrear el espacio alveolar. El espacio alveolar puede contener células inmunológicas e inflamatorias, citoquinas, enzimas, agentes infecciosos y ambientales.

La lavativa broncoalveolar representa un método de exploración de los territorios alveolares, es decir, el "pulmón profundo". Mediante el estudio de las poblaciones celulares, proporciona información interesante para el diagnóstico y seguimiento de un número determinado de enfermedades respiratorias difusas (sarcoidosis, fibrosis pulmonar, neumopatía inmunoalérgica). Además, a pesar de los riesgos y el posible dolor para el paciente, este examen es muy rentable (en términos de beneficio/riesgo) para establecer un diagnóstico diferencial.